Consideraciones premilinares de una visión sobre la política
dominicana.
1.
Época trujillista y el fenómeno del caudillo
benefactor y padre de la patria
2.
Ajusticiamiento a Trujillo y último día del
trujillismo y el primero de lo mismo
3.
La herencia del tirano y los gobiernos pro
status quo
4.
De Juan Bosch a la guerra de abril, un despegue
democrático aplastado antes de volar
5.
Balaguer, el contaminante democrático y el
ejemplo del mal
6.
La era constitucionalista disque democrática de
1996 a nuestros días, o mejor llamado el periodo del faraón con la piedra en el
zapato de Hipólito
Bajo esas premisas cumplo en realizar mi análisis y sé de
antemano que no es nada histórico, no tiene basamento específico en la realidad
puntual ya que por mi condición de extranjero no sé las intríngulis, los
nombres y los acontecimientos al detalle cómo habría de saberlo un hijo de esta
noble patria.
Así pues dado este pespunteado prólogo arranco con las
argumentaciones.
RD es un estado organizado bajo los cánones que nos
enseñaron en occidente a hacerlo. Cuando, como toda América fuimos colonia
directa de la bestialidad de Europa, y esta impuso en nosotros sus modos formas
y sistemas de moralidad, organización construcción, explotación, dogmas,
familia, mitos y más, sepultando sin pena ni gloria a las originarias formas en
que habían construido el mundo simbólico y sus interacciones los pobladores
primeros de estas ínsulas, al otro lado de la mar océano.
No conformes con eso,
la migración variada y constante de culturas como la Española/mora, la
negra africana, la banca nórdico europea, la flamenca, gitana, gala, judía y
más fueron generando en estas tierras un crisol no de culturas solamente sino
como es lógico un amasijo de diferentes dogmas de organización social, que en
los primeros años del atropello se sintieron leve mente, mas cuando las puños
de unos pocos nobles, inconformes con el dominio de la corona quisieron trocar
las relaciones de poder, y con el ejemplo primero de Haití, las luces llegaron
a este vasto Nuevo Mundo .
Las luces me refiero a las formas, modos y lógicas que
aquellos independentistas de la corona vinieron y organizaron el cuerpo social,
político ,productivo de los nacientes estados que irían configurando lo que
desde el río Grande hasta la Patagonia, hoy es Latinoamérica.
Los preceptos organizacionales se fundaron como está claro
en la ideología de la revolución francesa, Rousseau, quizá fue uno de los
mayores inspiradores en esta construcción del Estado que entre saltos,
culetazos, barrotes, desapariciones, luchas incesantes, dictaduras y más malos
tratos que buenas intenciones ha llegado al día de hoy a ser lo que es en el
continente entero, en esta neo colonia que al parecer, está despertando en el
Sur, adónde se inclinan las miradas.
En este punto la creación insipiente y originaria de la
estructura del Estado dominicano tiene sus bemoles particulares, que vistos sin
la pasión de un hijo de esta tierra puede explicarlo desde el desarraigo.
Gracias a los lios
que tenía la corona, la España Boba permite el primer intento, hijo del sueño
taciturno la Trinitaria logra Núñez de Cáceres y el movimiento independentista
de dar a luz a una primera república, la que se va, al poco de nacer, por los albañales y
es recordada como la Independencia efímera.
Luego, tras ver como el poder se le va de las manos se abre
espacio a un anexionismo con Haití, donde Jean Pierre Boyer, intenta crear una
sola nación lo que a los poderes e intereses de rd NO LE CONVENÍAN Y SE GENERA
UNA GUERRA de intereses que termina en
batallas campales entre los dos aliados que, a partir de allí se declararían la
enemistad eterna y perpetua e inventarían el mito de la patria y el mal vecino.
Desesperados los padres de la patria claman ayuda a la
corona española y optan por ser otra vez “ciervos de blancos a tierra de
negros”
Luego llegarán las guerras de la restauración y la segunda
República, con ello el largo y doloroso
parto del estado dominicano llegaría a su fin y desde aquellas épocas la
voluntad de unos se ha impuesto en otro y el poder ha pasado de mano en mano
hasta dar la bienvenida a la mal llamada
democracia, el juego partidista en el que los poderes estatuidos del capital
aún persiguen de forma casi descarada el mantener tensas las riendas del
carruaje con placa RD.
Un hito que marca sin lugar a dudas proceso de construcción
de la conciencia política contemporánea en RD es el hecho de haber permitido durante 3 décadas, a uno de los más crueles y
déspotas tiranos de la historia de este continente, digno aliado de Stroessner y
Pinochet, el genralísimo Trujillo, rey de la sangre, la muerte y el abuso del
poder, figura que instituyó en pánico como moneda en toda la isla, gobierne los
destinos de la patria
De él y gracias a él se configuraron figuras terribles en la
organización mental política:
0.- punto de partida. El estado es Trujillo y todo le
pertenece, Ciudad Trujillo, plazas campos, ciudades y sobre todo…mujeres.
1.- El que tiene poder, debe ejercerlo. El abuso a la orden del día, ejemplos sobran
en todas las esferas, y todos se sienten impunes y amparados por un manto de
poder, diputados, alcaldes jefes, quien tenga una cuota de poder debe ejercerla
o más aún, procurarla.
2.- El paternalismo a ultranza. Quien está en el poder, es
el padre que sabe todo, lo que impone como norma la centralización completa del poder, ejemplo
claro hasta hoy el presidencialismo pujante, si no hay luz…presidente
resuélvanos, si no hay agua, si no hay asfalto… presidente necesitamos de
usted. Y claro esto se refleja en todo, en la casa en el trabajo y obviamente
en la vida pública.
3.- El terror como bandera. El pánico al poder es evidente,
y se reforzó en RD tras la poblada del 84 u 82, claro ya en esa época Trujillo
había sido pasto de los gusanos. Pero ese tirano del miedo hizo su mejor
bandera, y de ese tema se sabe de sobra. Por lo que aquí se puede decir también
un claro matiz de la realidad dominicana y que alude al poder, de facto o de
hecho, quien tiene el poder asume que, o se está con ellos , o se está contra
ellos, no hay puntos medios.
4. fruto de la cultura del terror, nace todo la piratería del
calliesismo, los soplones, los anda ve y diles, los celadores del oprobio, la
lumpen traficante del silencio impuesto por el falo magnánimo del insaciable
chivo y sus arteros secuaces traficantes de los bienes y propiedades de la partía
toda
5.- El odio de la RD “blanca” frente a la negra prole
haitiana. Como si las guerras fratricidas entre dos pueblos hermanos y que
además comparten el mismo territorio fuesen poco en los inicios de las dos
repúblicas, Trujillo orquesto, durante su imperio un odio, desprecio y asco por
lo haitiano que permeo todas las capas y estructuras sociales de RD, se dio así
rienda suelta al mito de la diferencia de lenguas, culturas, religiones y
organizaciones socio políticas entre los dos pueblos, fomentando el discurso
que llevaría a escenificar en el campo de batalla masacres dignas de un Hitler isleño al que le faltó en su
currículum un Auswitch al carbón para salir de esa, su peor pesadilla y a decir
del tirano, el retardo del progreso ansiado.
6.- una política de estado contra las diferencias, contra la
izquierda e imposición de la religión como sistema de control. No hace falta
abundar, solo cabe recordar que en este periodo triunfa la Revolución Cubana, y
esto es el comodín para eliminar a quien, como ya dije, o esta conmigo, o está
en contra de mí.
7.- Bases de la nación como institución. Si algo hay que reconocer,
y claro con 30 años en el poder, es que el
tirano fundó las bases de la institucionalidad de la RD moderna, sí,
pero a un precio muy alto para la nación. Y con las bases edificó las
estructuras físicas de las instituciones que amparan hoy, y ampararon en su
momento el etéreo concepto del estado dominicano.
Quedan varios puntos sueltos pero al menos intento poner los
más relevantes sobre el tapete y que se entienda cómo estos son los pilares del
accionar político del SER dominicano y los que son asumidos por la mayoría como
los aceptables, lógicos o normales porque son con los que se formaron
generaciones y generaciones.
Por el cansancio, por
la desidia, poder el despecho, o por lo que sea, un grupo de ciudadanos decide
poner fin a la larga noche trujillista y ordena a Tánatos abrir las jaulas del
averno para bienvenir a su hijo.
Muerto el perro, dicen, se acabó la rabia. Pero en RD la
rabia seguía suelta tras la muerte del
perro, sus pulgas infinitas e infames propagaron este mal por mucho tiempo en
las instituciones que no quisieron soltar y claro no lo harían con facilidad
pues entre otras razones la razón de Estado se imponía, y más con la venia, el
apoyo y el auspicio del gobierno más democrático de todos y que se caracteriza
por el respeto al derecho de los pueblos a optar por su destino, el Gringo. Sumado
al temor de que tropas cubanas lleguen a la isla y aprovechando la situación y
el descontento logren abrir un frente de combatientes que pueda hacer de esta
isla una nueva Cuba.
Muerto el perro, los cachorros heredan el poder y es
Balaguer sin lugar a dudas el hijo predilecto de esta saga.
En el ir y venir de esta novela de tendedero, en la trama de
la historia florecen dos caudillos, juan Bosch y Peña Gómez.
Cuando las elecciones democráticas enfrentan a los
candidatos Bosch y Balaguer en comisios populares y triunfa Bosch, se
desencadena una de las páginas más loables de la historia reciente de RD.
La guerra de abril, que junto a los constitucionalistas
terminaría enfrentando una inavación populosa, multitudinaria de tropas
americanas que inicialmente pararon en la isla como un preámbulo a lo que
serían los combates en tierra vietnamita.
Muchas estrellas brillaron en la contienda y el pueblo
dominicano trató por muchos medios de tomar las riendas de un poder mal
delegado pero, como suele pasar, frente al clamor de las masas y la fuerza de
las armas, las negociaciones políticas terminaron en el exilio de Bosch y un
gobierno títere que convocaría a elecciones en 2 años tras los que se vivirían
los 11 años del yugo férreo del anticaudillo Balaguer, la pulga resistente del
trujillismo que traería a RD años de bienestar para los que tenían y miseria,
opresión, muerte y desaparición a quienes no besaban el anillo casi papal que
se había adueñado de la silla presidencial en el palacio nacional.
Qué dejan esos 11 años como heredad política…
a.- se continúa con
el legado trujillista modificado a un estado de supuesta democracia
b.- se impone el fraude y la adulteración de la decisión
popular como forma de ejercicio democrático, basta recordar las elecciones de
Balaguer en las que, ganaba sea como sea, se iba la luz y ya!!! Nuevo
presidente, allí los fraudes más brutales.
c.- sordera estatal. El estado soberano atendía sus
prioridades y transaba solo con quienes quería, llegando a ser anecdóticas las
relaciones de poder entre Balaguer y por poner un ejemplo el empresario español
Pepín Corripio.
d.- el imperio de lo dado. Recordar las filas infinitas para
las navidades en la casa de Balaguer, eso es en todo, yo asisto al mitin si me
dan... por poner un caso
e.- el saber que todo tiene un precio, y lo que no se puede
comprar y estorba se elimina. Casos de los periodistas eliminados, además de
los gremios, y grupos sociales que intentaron transformaciones en esos años.
Y como si fuera poco, Balaguer logró de una manera ponzoñosa
contaminar el entorno político con estas prácticas que, los nacientes partidos
PRD, PLD y otros asumieron esas formas como suyas propias y las han perpetuado
impunemente.
Si bien en este contexto es que Jorge Blanco es electo presidente y es en su
gobierno que se presenta un caso interesante de acción popular, la famosa
Poblad (http://www.diariolibre.com/noticias/2008/05/23/i17360_index.html)
acto civil desorganizado y acéfalo en el que los dos caudillos (J. Bosch y Peña
Gómez) brillan por la ausencia y/o por
ser los conciliadores frente a la matanza generalizada que tropas especializadas
del ejército realizan en calles plazas y caminos de toda la nación.
Así transcurren estos dulces
hasta que entre las olas del nuevo orden se impone el Neoliberalismo y
se requieren transformaciones profundas en la organización del estado.
Llega rozagante la era democrática y en elecciones populares
gana un joven que se perfilaba como líder y que desde entonces a dado muestras
de ser el heredero ideal de la historia dominicana… en un intermedio a los 12 años de Leonelismo
pasamos por un camino empedrado de la mano de Hipólito , pero las cosas poco
han cambiando
La ignorancia campea y al estado no le interesa cambiar esta
condición de la que es beneficiaria la maquinaria electoral que no se detiene.
En RD la política partidista, la Pelota y la religión son
los temas afines de las que sus fieles hacen banderas y se rasgan las
vestiduras sin entender razones. Es una pasión y como tal solo siente y de
tanto sentir anula con concepto básico de la razón política y da pie a la
demagogia, al clientelismo, al mesianismo y a todas las lacras habidas y por
haber en el ejercicio político en las competencias por alcanzar los más altos y
representativos escaños del poder del estado para, sea como sea, salir de la olla
y pararse a como dé lugar, pues, si hay en este aspecto que reconocer algo, es
que, el fin justifica los medios.
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