martes, 29 de mayo de 2007

El colibrí




EN ALGUNOS caseríos perdidos en los Andes, los memoriosos se acuerdan de cuando el cielo estaba montado sobre el mundo.

Teníamos al cielo tan encima que la gente caminaba agachada, y no podía enderezarse sin darse un cocazo. Las aves se echaban a volar y en el primer aleteo se chocaban contra el techo. El águila y el cóndor arremetían con todos sus ímpetus, pero el cielo no se daba por enterado.

El tiempo del aplastamiento del mundo terminó cuando un relampaguito bailandero se abrió paso en el poco aire que había. El colibrí pinchó el culo del cielo con su pico de aguja y a los pinchazos lo obligó a subir y a subir y a subir hasta las alturas donde ahora está.

El águila y el cóndor, aves poderosas, simbolizan la fuerza y el vuelo. Pero fue el más chiquito de los pájaros quien liberó a la tierra del peso del cielo.

(Eduardo Galeano)

1 comentario:

María Eugenia del Pozo dijo...

tal vez si transportaramos esto a la ideología dominicana no fuera tan real, ya que aquí los chiquitos se queddan ahi, mientras los grandes no hacen más que fanfarronear, o tirando cada quien para su lado, ojala y aalgun colibrí pueda ir pinchandole el culito al cielo de la miseria social de mi país.